Este pequeño combate reproduce el bautismo de fuego de la primera unidad australiana en África. Se trata de una escaramuza entre una compañía italiana y otra australiana. Los italianos tienen como misión entrar en un hex determinado. Los australianos deben impedirlo y eliminar, además, dos unidades enemigas.

Los italianos se despliegan en un wadi y avanzan hacia el hex que tienen como objetivo. Los australianos, que se desplegaban primero, habían formado una pantalla defensiva por la previsible vía de acceso de los italianos. Éstos intentan sortear la pantalla y son blanco del fuego de oportunidad enemigo, que desorganiza alguna unidad. Sucesivamente los australianos maniobran para impedir el acceso de los italianos a su objetivo. Hacia la mitad de la partida los italianos se ven detenidos y sin fuerzas para sobrepasar la barrera australiana. Ante la imposibilidad de conseguir su objetivo, los italianos deciden retirarse hacia el wadi y aguantar el previsible contraataque de los australianos sin bajas. De esta manera al menos empatarían la partida.

Los italianos se retiran ordenadamente hacia el wadi, salvo un pelotón de infantería que se retrasa y es destruido en un asalto. El tiempo se echa encima y al final los australianos no consiguen causar más bajas a sus enemigos.

Empate.